lunes, 25 de octubre de 2021

Beatus ille


 Una huebra de arar tengo en el río

que recibí, hace tiempo, de mi abuelo.

Me gusta estar allí; y a veces suelo

visitarla; por irme del gentío.

 Tiene mi predio un pozo muy somero,

que mana entre las zarzas y las piedras.

Y una casita oculta entre las hiedras,

que abraza, con amor, un limonero.

 Tiene también: Una higuera frondosa;

y una parra arrugada por los años.

Un peral, un laurel, unos castaños;

un nogal, y una planta de mimosa.

Una estampa de paz maravillosa,

do quisieran vivir los ermitaños.